miércoles, 23 de abril de 2008

MÁS DE LA MISMA AGRICULTURA SIGNIFICA MÁS HAMBRE

Hay 850 millones de personas desnutridas en el mundo y ese número va a aumentar con el cambio climático y la expansión de la población de 6600 a 9000 millones de personas en las próximas cuatro décadas. La inequidad en la distribución de alimentos resulta evidente a los ojos de quien quiera ver el mundo que lo rodea y, para peor, los precios de esos mismos alimentos siguen subiendo y subiendo.

El panorama no puede ser menos alentador. Un nuevo informe del grupo de evaluación internacional del papel de los conocimientos, la ciencia y la tecnología en el desarrollo agrícola sostiene que todos estos factores juntos plantean un desafío global que requiere una respuesta global inmediata.

La primera “revolución verde” de los ´60 y ´70 impulsó una agricultura saturada de fertilizantes y pesticidas. La segunda, la de los ´90, sigue llenándonos de transgénicos y agroquímicos. El afán de lucro, en ambos casos, ha traído aparejado graves consecuencias para el medio ambiente, la salud humana y la equidad social.

La Evaluación Internacional de Ciencia y Tecnología Agrícola (IAASTD) celebró su sesión plenaria intergubernamental del 7 al 14 de abril en Johannesburgo, Sudáfrica. El IAASTD fue creado en el 2002 por el Banco Mundial y la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) y comenzó su trabajo en el 2004 con el objetivo de “mejorar la vida, la salud y la prosperidad de millones de agricultores pobres”. Durante los tres años siguientes (2005-2007), un grupo de expertos científicos seleccionados por IAASTD evaluaron la conveniencia, calidad y eficacia de los conocimientos agrícolas, la ciencia y la tecnología, así como las políticas y soluciones institucionales a estas cuestiones. Alrededor de 400 expertos se reunieron la semana pasada en Johannesburgo para acordar un texto que sería aprobado por los delegados de los gobiernos respecto a estas cuestiones.

Australia, Canadá y los Estados Unidos de Norteamérica no aprobaron el informe de la IAASTD. La Argentina, que cuenta con la Lic. María Cristina Plencovich entre los miembros del IAASTD, miró para otro lado. La Lic. Plencovich es Asesora Pedagógica de la Facultad de Agronomía de la Universidad de Buenos Aires. En otras palabras: La Argentina no envió a la IAASTD a una verdadera especialista en las cuestiones agrícolas lo que pone de manifiesto el escaso interés de este país en colaborar con un organismo que claramente cuestiona sus prácticas agrícolas.

El informe de la IAASTD subraya la necesidad de un profundo replanteamiento del enfoque para la agricultura y admite la falta de capacidad del “mercado” para asegurar seguridad alimentaria a los pobres. El informe es crítico respecto del dominio que las compañías multinacionales tienen de los mercados de las semillas y fertilizantes, a la vez que hace un llamamiento para una implementación de las estrategias agroecológicas, en particular, para lograr la sostenibilidad del medio ambiente resaltando las dudas y controversias relativas a los cultivos genéticamente modificados. El informe reclama un nuevo paradigma de agricultura centrándose, sobre todo, en el papel de los agricultores pobres, que desarrolle de una sana y justa agricultura ecológica basada en los principios de la llamada agricultura orgánica.

El informe en cuestión metió el dedo en la llaga de la biotecnología a riesgo de que los poderes ocultos detrás de los gobiernos objetarían algunas de las conclusiones del informe, sin embargo los cuestionamientos respecto de cómo los organismos genéticamente modificados alteran la biodiversidad y el ecosistema son muchos y de peso. El control que de las semillas por las corporaciones terminará arruinando el sustento de los pequeños agricultores, además de que es absolutamente contrario a sus necesidades el énfasis que esas mismas corporaciones ponen en costosas investigaciones.

A pesar del origen del IAASTD, hay un dato significativo que habla del valor del informe: las empresas de la industria biotecnológica se “retiraron” el año pasado de los debates del organismo afirmando que sus informes eran “injustos” con su industria. Según el Resumen Ejecutivo del Informe de síntesis de la Evaluación Internacional de Conocimiento Agrícola, la Ciencia y la Tecnología para el Desarrollo, “la biotecnología ha estado siempre en la vanguardia del cambio. El cambio es rápido, los dominios de que se trata son numerosos y hay una falta de comunicación transparente entre los actores. Por lo tanto la evaluación de la biotecnología moderna va a la zaga del desarrollo, la información puede ser anecdótica y contradictoria, y la incertidumbre sobre los beneficios y los daños es inevitable. Hay una amplia gama de perspectivas sobre el medio ambiente, la salud humana y los riesgos económicos y los beneficios de la biotecnología moderna, muchas de las cuales son aún desconocidas”. [1]

A modo de ejemplo, ¿por qué no se popularizan las técnicas agrícolas de conservación que fueron utilizadas en Honduras en proyectos del Fondo Internacional para el Desarrollo Agrícola? El Programa Lempira Sur fue implementado por el gobierno de Honduras con apoyo técnico de la FAO y recursos económicos de los Países Bajos, durante un período de más de 10 años, comenzando en 1990 y terminando en el 2004. El secreto: recurrir a la práctica tradicional de “labranza cero” que, además, ayuda a prevenir los deslizamientos de lodo Recordemos los estragos que causó el huracán Mitch a su paso por Honduras, que a fines del 1998 devastó el 70% del territorio hondureño y dejo un saldo de 19000 muertos. Precisamente los métodos probados de “labranza cero” han sido estudiados por los 400 expertos de diversas disciplinas del IAASTD quienes, por otra parte, han examinado el conocimiento agrícola alrededor del globo. [2]

El informe elaborado por el IAASTD enfoca también en la cuestión de la irrigación y sugiere poner mayor énfasis en quienes sufren escasez de agua o la gente es muy pobre como para pagar una irrigación artificial. Otra cuestión fundamental que destaca el informe tiene que ver con la responsabilidad de gobiernos y organizaciones para ayudar a los pequeños agricultores a diversificar sus cultivos y, de esa manera, mejorar su dieta y reducir los riesgos de las fluctuaciones del mercado o el clima.

El encarecimiento de los insumos, particularmente el petróleo, ha impactado en la agricultura y, por ende, en el precio de los alimentos. Pero a esto se suma la irrupción de los biocombustibles que agrava la situación puesto que el producto de la tierra aumenta su demanda al incorporar como consumidores a los motores de los más ricos elevando aún más el valor de los alimentos. En 2007, el precio del maíz se incrementó 31 por ciento, el de la soja 87 por ciento, y el del trigo 130 por ciento. Las reservas de granos están en su nivel más bajo y el contenido de los silos sólo alcanzaría para 40 días de abastecimiento.

Más allá de los detalles del informe, lo que debería implementarse es un gran debate en torno a cómo los pueblos asegurarán su soberanía alimentaria y, además, de una manera solidaria con la madre tierra. [3] En la ausencia de este debate se va consolidando el hambre de cientos de millones de seres humanos y sería un grave error de las clases dirigentes pensar que podrán ponerse a salvo de las consecuencias del colapso del actual sistema de agronegocios.

El informe concluye que sin cambios radicales en el modo en que el mundo produce sus alimentos, el planeta sufrirá daños permanentes. El Director del IAASTD, el Profesor Robert Watson, afirmó “más de lo mismo significa que no seremos capaces de alimentar el mundo, más de lo mismo significa que continuaremos degradando el medio ambiente, más de lo mismo significa que nunca solucionaremos los problemas de pobreza y hambre”…

Programa del 17 de abril de 2008 [4]

[1] Sugerimos la lectura, en este mismo blog, de la nota titulada “EL MUNDO SEGÚN MONSANTO”
http://pllradio.blogspot.com/2008/04/el-mundo-segn-monsanto.html

[2] Lecciones aprendidas. Participación Ciudadana en Lempira Sur
http://www.fao.org/participation/espanol/lempira-lessons.html

[3] La seguridad alimentaria es una situación que existe cuando todas las personas, en todo momento, tienen acceso físico, social y económico a suficientes alimentos inocuos y nutritivos que satisfagan sus necesidades dietéticas y preferencias alimenticias para una vida activa y sana (FAO, The State of Food Insecurity 2001). La soberanía alimentaria se define como el derecho de los pueblos y los estados soberanos a decidir democráticamente sus propias políticas agrícolas y alimentarias.

[4] El 17 de abril es el día mundial de la lucha campesina. La fecha elegida conmemora la lucha de los 19 integrantes del Movimiento de trabajadores rurales Sin Tierra (MST), de Brasil, asesinados en 1996 en la masacre de El dorado dos Carajas.

lunes, 14 de abril de 2008

MOCASE: “QUIENES TRABAJA LA TIERRA NO ESTAN NI EN C.R.A., NI EN LA S.R.A., NI EN LA F.A.A. NI EN ConInAgro”

Tantas veces la prensa oficial habla de trabajadores del campo cuando, en realidad, se trata de meros gerentes de importantes emprendimientos agroindustriales que nunca se ensucian las manos trabajando la tierra. “Prende la Luz” quiso hablar con los verdaderos trabajadores de la tierra y fue por la gente del MOCASE. A su vocero, Ángel Strappazzón, lo encontramos, teléfono celular mediante, en el camino entre Deán Funes y San José La Dormida, la zona de los sojeros de Jesús María. Y este fue su testimonio con relación al paro agropecuario y el modelo agrario que La Argentina adoptó a mediados de los noventa.

Prende la Luz: Parte de la gran mentira es poner a la opinión pública en la obligación de tomar partido por este “Boca-River” del llamado conflicto agrario. ¿Cuál es la visión diferenciada que tiene el MOCASE sobre esta cuestión?
Ángel Strappazzón: Está bueno lo que plantean ustedes como pregunta y como cuestionamiento. Creo que hay una suerte, por debajo, de subestimación a nuestro Pueblo, a nuestra ciudadanía en su conjunto aunque, por supuesta, nadie “come vidrio” y muchos saben perfectamente que no se ha mostrado todo el “campo” argentino. El campo es un concepto que, de por sí, tiene una tendencia, el mundo rural ya es otra cosa, tiene otras dimensiones.
Me encanta lo que ha hecho la Facultad de Ciencias Sociales de denunciar el abuso ético que han cometido algunos canales de televisión [1]. Canal 13 y América han sido increíblemente tendenciosos hasta el punto de llegar a llamar “trabajadores rurales” a gente que gerencia un campo desde una pequeña oficina o desde su casa-estancia o desde un edificio, dependiendo de los niveles de las cuatro entidades (CRA, SRA, FAA y CONINAGRO). Hoy por hoy, son respetables algunos pequeños productores de la Federación Agraria Argentina en cuanto que sí trabajan directamente la tierra y algunas cosas las gerencian, pero hay pequeñas o medianas empresas donde contratan personas y, aún siendo de la FAA, los tienen bastante mal pagos porque la gente pero paga son los peones.
Nosotros, como Movimiento Campesino, somos productores que el 50% lo producimos para nuestras familias y el otro 50% es excedente de carne, algodón, frutas, hierbas medicinales, productos agro industrializados de manera artesanal como dulces y mieles que son comercializados. Nosotros tenemos certificación orgánica para nuestras mieles que requieren un proceso agro ecológico particular.
El tema tiene muchas aristas: una es la de tapar la realidad más compleja que tiene el campo argentino porque, siguiendo con el concepto que han usado los periodistas, la inmensa mayoría de productores directos de la tierra y que no tienen empleados, que trabaja su familia casi en pleno no pertenecen a estas cuatro entidades. En estas entidades están las grandes maquinarias, los agroquímicos, los herbicidas, la explotación intensiva de la tierra y la búsqueda de maximizar la ganancia. Esto no significa que todos los de CRA, todos los de FAA estén produciendo soja pero lo están haciendo en un alto porcentaje.
A veces un miembro de nuestras familias salía a trabajar afuera con los productores de estas entidades para poder mejorar nuestro predio pero hoy con la soja… nuestros hijos no quieren ir a trabajar la soja porque todo lo que es la formación, la concientización (que se pierde) y todo lo que vemos que está causando en los pueblos el glifosato, que hoy día se vende como RoundUp por la Monsanto que tiene su planta en Zárate donde produce 125 millones de litros al año. Entonces, digamos, el campo argentino, románticamente mencionado, donde está el aire puro no existe. O, mejor dicho, existe pero no dentro de estas cuatro entidades.

PLL: Permitinos aclarar que cuando vos mencionabas el glifosato, el RoundUp, estamos hablando del herbicida que se utiliza como parte del mecanismo de siembra directa de la soja. Es decir, la soja se siembra “entre los yuyos” y luego se fumiga con este herbicida que “quema todo” menos la soja…
AS: Quema todo… y entiendo lo que estás queriendo insinuar porque todos los procesos de millones de años que realiza la naturaleza el glifosato los está frenando. O la pregunta es ¿los está frenando? ¿Qué pasa con esas plantas que no crecen en 23 millones de hectáreas de La Argentina (superficie equivalente a toda la utilizada en Francia para el agro o la totalidad de la superficie de Italia)? Están siendo anulados los procesos de evolución vegetal en estos territorios de La Argentina y no sabemos lo que puede llegar a significar. Este es un aspecto entre muchos otros a analizar. El otro aspecto es el de la rentabilidad y que no nos vengan con eso de “si es pecado ser rico”, lo que estamos hablando es de lo antiético e irresponsable de la forma…

PLL: … a costa de qué…
AS: Epa!, epa! ¿A costa de que dentro de diez años esas 23 millones de hectáreas no puedan ser utilizadas y se produzcan procesos de desertificación donde finalmente queden anuladas? Y que además no sabemos qué procesos biológicos pueden “explotar” a raíz de eso. Les cuento una que nadie me lo va a poder desmentir: en los bosques del Gran Chaco Americano nace una langosta que se llama la “quebrachera” la cual, a raíz de haber destruido más de un millón y medio de hectáreas de bosques, se ha multiplicado cien veces en los últimos tres años y ha ido a atacar, ya no al quebracho y al algarrobo con el cual se sustentaba y vivía sino, a la soja. Con lo cual van a querer inventar un veneno para matar a la quebrachera que, en realidad, tiene como función biológica, entre otras cosas, matar gran parte de los bichos que nacen en los bosques. Imagínense, entonces, el desequilibrio que van a producir…
La discusión de fondo es económico política porque nunca nadie dijo que este proyecto no es argentino sino norteamericano. La Monsanto es parte de un proyecto norteamericano que te endulza al principio… ¿y después qué?

PLL: Lo que estamos viviendo ahora…
AS: Exacto. Lo que estamos viviendo es el primer alerta del “callejón sin salida” al que nos lleva la soja: la disputa del dinero. Luego va a venir el otro “callejón sin salida” que va a ser el problema de los rendimientos que van a ir cayendo de los distintos cultivos de todas esas hectáreas, y luego viene el tercer problema, que ya empezó a aparecer y por el cual nosotros hemos presentado amparos, que es el de la salud.
Nosotros hemos presentado amparos a través de (Eugenio Raúl) Zaffaroni, un amparo colectivo para más de cincuenta mil familias campesinas y más de mil cien parajes rurales de Santiago del Estero. Los salteños quieren sumarse pero, en principio, ya lo terminamos para que investiguen al glifosato y los procesos de deficiencia respiratoria que están teniendo cientos y cientos de niños en el bosque santiagueño. Un amparo colectivo y una indemnización multimillonaria, y no es porque queramos la “guita” sino porque si nosotros ganamos utilizaremos ese dinero para recuperar bosques, a hacer una fundación. Y queremos ganar ese juicio porque no es justo que nos estén asesinando silenciosamente

PLL: Les deseamos la mayor de las suertes en esta causa y, ojalá, que los propios familiares de quienes cortaban las rutas, con esa misma valentía, lleven sus testimonios a los estrados para mostrar como, entre ellos, hay decenas de miles de enfermos porque sería mucho más que una mega causa…
AS: Por supuesto. Es que eso va a venir, es el próximo atolladero, el de la salud gravemente dañada de los que están haciendo la soja transgénica.

En uno de los últimos segmentos de la entrevista, a Ángel Strappazzón se lo escuchaba indignado preguntando ¿dónde estaban las “mujeres en lucha” que fueron “echadas a patadas” de las sedes de la FAA y la SRA en 1998 cuando decían “nos están quitando las tierras” y se las quitaron? ¿Qué vienen a azuzar ahora que van a desaparecer los pequeños productores quienes fueron cómplices de las grandes multinacionales y de los gobiernos de este modelo de agronegocios cuando ya han desaparecido trescientos mil familias en el campo? Strappazzón también se irritaba por el tratamiento que los medios habían dado del llamado “conflicto agrario” comparándolos con el cefalófago de la película el “Silencio de los Inocentes” (“The Silence of the Lambs”) protagonizado por Anthony Hopkins que se comía el cerebro de sus víctimas. Alguno de sus dardos los apuntó a la América TV del colombiano Francisco de Narváez y, en particular, al cejijunto Santo Biasatti de Canal 13 de quien dijo “creí que era otra cosa”. Para ser honestos, y se lo hicimos saber al aire al vocero del MOCASE, a nosotros Biasatti no nos sorprendió…

Programa del 3 de abril de 2008.

[1] Pueden consultar la “Resolución del Consejo Directivo de la Facultad de Ciencias Sociales de la UBA, ante la actuación de lo medios durante el lock out patronal del campo” en http://www.fsoc.uba.ar/archivos/institucional/medios.doc o
http://conadu.org.ar/wordpress/?p=117

domingo, 13 de abril de 2008

EL MUNDO SEGÚN MONSANTO

El ministro de Economía de La Argentina, Martín Lousteau, su ministro de Justicia, Seguridad y Derechos Humanos, Aníbal Fernández, el actual y ex Presidente de la Federación Agraria Argentina, Eduardo Buzzi y Rene Bonetto, los referentes de Cámara de Industrias Aceiteras y de los Productores en Siembra Directa, a pesar de esta rencilla de opereta que vinieron protagonizando en las últimas semanas, coincidieron en algo: “no hay que demonizar a la soja”. ¿Temerán que el demonio se sienta ofendido? La soja que se cultiva en La Argentina, por siembra directa, es la RoundUp Ready propiedad de Monsanto y de sus “bondades” ya venimos contado algo.

El pasado martes 11 de marzo, el canal francoalemán Arte puso al aire un revelador documental titulado “El Mundo según Monsanto” de la realizadora francesa Marie-Monique Robin y la documentalista Anne Gelli. Robin, que ha publicado un libro con ese mismo título apuntó sus dardos a la multinacional norteamericana con sede en Saint-Louis (Missouri) que en más de un siglo de existencia acumula en su prontuario el haber sido el principal productor del agente naranja utilizado como desfoliante durante guerra de Vietnam, del agente carcinógeno PCB utilizado como aceite refrigerante en transformadores eléctricos, del aspartame (el peligroso edulcorante conocido como NutraSweet) y de las hormonas de incremento de la producción láctea prohibidas en Europa y Canadá.

La periodista Marie-Monique Robin logra desnudar el criminal doble discurso de la Monsanto indagando a través de una serie de documentos disponibles en Internet y los testimonios de las víctimas de las acciones de la Monsanto. Durante el documental se da el lujo de poner en ridículo a unos cuantos funcionarios públicos evidenciando sus vínculos con la mega compañía química que hoy posee el 90% de las patentes de semillas modificadas transgenicamente.

Robin comienza pegando fuerte: le pone la lente de su cámara al drama de los pobladores de la zona más pobre de Anniston (Alabama) que tuvo que soportar que durante casi 40 años la Monsanto descargara toneladas del ahora prohibido PCB en un arroyo al oeste de la ciudad y en vertederos a cielo abierto. Miles de páginas de documentación confidencial de la compañía revelaron que sabían perfectamente la criminalidad de sus actos pero decidieron ocultarlo [1].

Según su propio “website”, Monsanto se promociona como “una empresa agrícola (donde) aplicamos la innovación y la tecnología para ayudar a los agricultores de todo el mundo a que sean exitosos, a producir alimentos más sanos, la mejora de la alimentación animal y más fibra (sic), mientras que al mismo tiempo reducimos el impacto de la agricultura sobre nuestro medio ambiente”. Bueno, para decirlo sencillamente, nada de esto es cierto y en “El Mundo según Monsanto”, Marie-Monique Robin lo justifica punto por punto.

En 1996, el Fiscal General de New York, Dennis C. Vacco, demandó a la Monsanto por publicidad engañosa en lo que respecta a la seguridad de sus herbicidas RoundUp (basados en el glifosato). Sus investigaciones pusieron de manifiesto que el glifosato no es precisamente “biodegradable” y "amigable con el medio ambiente" [2]. Asimismo, el documental presenta el impresionante testimonio del Dr. Robert Bellé, investigador del Centro Nacional de Desarrollo Científico de Francia que explica los resultados de sus estudios demostrando que la exposición al RoundUp está asociada con varios tipos de cáncer o desórdenes reproductivos y de desarrollo porque su principal componente activo, el glifosato, produce “inestabilidad genética” y “cambios en la regulación del ciclo celular” [3].

Otra foja penosa del prontuario “monsantiano” está relacionada con su hormona de crecimiento bovino (rBGH) cuyo nombre comercial es Posilac. Los testimonios de Samuel Epstein, Presidente de la Coalición por la Prevención del Cáncer y Profesor de la Universidad de Illinois, y de Pete Hardin, periodista del periódico Milkweed que reveló documentación confidencial de la Monsanto, son lapidarios. [4] El pus (consecuencia de la mastitis que sufren las vacan inoculadas con Posilac), los antibióticos y las hormonas inducidas por las inyecciones del rBGH son parte del cóctel blanco de la leche producida por las vacas que pasaron por las agujas de Monsanto y que produce en los humanos afecciones alérgicas, desórdenes hormonales, crecimiento prematuro de mamas y cáncer. El rBGH fue prohibido en Europa y Canadá… [5]

¿Cómo ha sido posible que los organismos que deberían velar por la salud de los consumidores norteamericanos no hayan prohibido el uso tanto de estos productos así como el empleo de los procedimientos transgénicos? El documental expone cómo funciona la “puerta giratoria” de la FDA (La Administración de Alimentos y Drogas de los EE.UU.) por la que quienes deberían controlar vienen o pasan a formar parte del staff de la Monsanto. Los casos de Linda J. Fisher, Michael A. Friedman, Marcia Hale, Michael Kantor, Josh King, William D. Ruckelshaus, Jack Watson y Michael Taylor son sólo algunos ejemplos

De este largo listado, precisamente, el bueno de Michael Taylor es entrevistado telefónicamente por Robin quien le pregunta si no le parecía incompatible su paso de Asesor Legal de la FDA al estudio jurídico King & Spaulding (que litigaba contra la FDA y tenía a la Monsanto entre sus clientes) y luego su retorno como Comisionado Adjunto de la FDA para finalmente ocupar el cargo de Jefe de la Oficina en Washington de la Monsanto. La respuesta de Michael pueden imaginarla… [6]

La Monsanto si no los puede corromper entonces los presiona y aísla. Tales son los casos del veterinario de la FDA entre 1979 y 1989, Richard Burroughs, y del investigador de la Universidad de Berkeley, Ignacio Chapela, que el film documenta [7] [8]. Los propios documentos de la FDA demuestran que hizo caso omiso a las advertencias que sus propios científicos hicieron respecto de los OGM (organismos genéticamente modificados) [9]. Tal es así que James Maryanski, ex coordinador de biotecnologías de la FDA, reconoce en el film que la autorización de comercialización de los OGM en 1992 fue "política", porque la discusión científica no estaba saldada. Obviamente los negocios de la Monsanto no podían esperar tanto estudio…

Monsanto controla la casi totalidad del algodón que produce la India donde ingresó con su transgénico Bt bajo las repetidas promesas de reducción del uso de agroquímicos y aumento de la rentabilidad del productor. Ocurrió exactamente lo contrario, no sólo el uso de agrotóxicos y la degradación de los terrenos se profundizaron sino que, además, sumergió a los algodoneros en impagables deudas para poder consumir sus insumos dejándoles como única escapatoria… el suicidio. En los estados de Maharashtra, Andra Pradesh y Karnataka las cifras oficiales del Ministerio de Agricultura de India dan cuenta de alrededor de 150 mil suicidios de campesinos entre 1993 y 2006 lo que representa una tasa de 30 suicidios diarios durante 13 años. El documental de Marie-Monique Robin muestras las escenas de la procesión fúnebre de un joven agricultor que se había suicidado bebiendo el insecticida que utilizaba con el algodón Bt de Monsanto. Una vez más, las promesas de la Monsanto terminaban en el cementerio [10].

La contaminación transgénica, es decir el pasaje de genes de las especies modificadas en los laboratorios de ingeniería genética a las especies nativas es un hecho comprobado, por más que los cultores de la alquimia transgénica pretendan ocultarlo. Hacia el final del documental “El Mundo según Monsanto” se han compilado una buena cantidad de testimonios de lo acontecido con los maíces mexicanos [11]. A finales del año 2000 los investigadores Ignacio Chapela y David Quist descubrieron la contaminación del maíz en la Sierra Juárez de Oaxaca, la cual fue confirmada, en el año 2001, por el Instituto Nacional de Ecología de México [12]. En el film, la investigadora de este instituto, Elena Álvarez Buylla, explica algunos de los detalles de las investigaciones que revelaron la transferencia de genes de las especies transgénicas liberadas al ambiente a las especies de maíz nativo que constituye la base de la alimentación de centenares de miles de mejicanos, particularmente los más humildes.

El documental cierra con testimonios de víctimas del uso de los agrotóxicos de Monsanto en tierras paraguayas donde enormes extensiones, al igual que en La Argentina, Brasil y Bolivia, se han deforestado para transformarlas en el desierto verde de la soja. En todas estas republiquetas sojeras sus gobiernos han sido cooptados por el poder económico de la Monsanto, como lo pone de manifiesto la entrevista al ViceMinistro de Agricultura del Paraguay, Roberto Franco. Es muy interesante escuchar a este tipo de personajes tratando de explicar lo inexplicable [13].

Dice la Monsanto en un documento titulado “Sembrando Valores” del año 2005: "La buena noticia es que la experiencia práctica demuestra claramente que la coexistencia de la biotecnología y los sistemas de producción convencional y orgánico no sólo es posible, sino que ellos conviven pacíficamente en todo el mundo y los agricultores tienen la posibilidad de optar entre diferentes métodos de producción" [14]. Nada más lejano a la verdad.

El documental, que recorre las desdichas de indios, mejicanos y paraguayos en su lucha desigual contra el poder de esta corporación, demuestra cómo la Monsanto se va adueñando de toda la cadena de producción de alimentos y, por ende, de nuestra soberanía alimentaria, dejando un reguero de destrucción y enfermedad. Y una agricultura sin agricultores…

Programa del 3 de abril de 2008


[1] “Monsanto Hid Decades Of Pollution” by Michael Grunwald (Washington Post), January 1, 2002;
http://www.washingtonpost.com/ac2/wp-dyn?pagename=article&contentId=A46648-2001Dec31
[2] Attorney General of the State of New York. Consumer Frauds and Protection Bureau. Environmental Protection Bureau. In the matter of Monsanto Company, respondent.
Assurance of discontinuance pursuant to executive law § 63(15). New York, NY, Nov. 1996
False Advertising by Monsanto Regarding the Safety of Roundup Herbicide (Glyphosate)
http://www.mindfully.org/Pesticide/Monsanto-v-AGNYnov96.htm
[3] “Pesticide Roundup Provokes Cell Division Dysfunction at the Level of CDK1/Cyclin B Activation” por Julie Marc, Odile Mulner-Lorillon, Sandrine Boulben, Dorothée Hureau, Gae Durand, and Robert Bellé, 31 Mar02
http://www.mindfully.org/Pesticide/2002/Roundup-Cell-Division-DysfunctionMar02.htm
[4] Got hormones - The controversial milk drug that refuses to die
By Jeffrey Smith - December 10, 2004 - NewsWithViews.com
http://www.newswithviews.com/Smith/jeffrey3.htm
[5] rBGH Ruled Unsafe for Canadian and European People and Cows
http://www.awionline.org/farm/rbgh-s99.htm
[6] El siguiente link no es incluido en el importante documental de Marie-Monique Robin, sin embargo es útil para conocer algunos de los “amigos” de la Monsanto y ejemplo más representativo de la llamada “puerta giratoria” de la FDA
http://www.politicalfriendster.com/showPerson.php?id=2590&name=Michael-Taylo
[7] Monsanto's Dirty Tricks Campaign Against Fired Berkeley Professor Ignacio Chapela,
Marina Littek of Italy's 'Green Planet' interviews Jonathan Matthews of GM Watch, 12/16/04
http://www.organicconsumers.org/monsanto/ignacio121604.cfm
o
http://www.gmwatch.org/p1temp.asp?pid=49&page=1
[8] Monsanto's World Wide Web of Deceit
http://ngin.tripod.com/deceit4.html
Curiosamente, y a pocos días de la emisión de este documental, esta nota fue removida de este link Internet. Quien proveía el servicio de “web hosting” de esta nota, hoy recibe al internauta con la siguiente advertenia: “The page you are attempting to access has been removed because it violated Tripod's Terms of Service”. Sin embargo, pueden consultar la nota de The Guardian en http://www.guardian.co.uk/comment/story/0,,715153,00.html
[9] FDA Documents show they ignored GMO safety warnings from their own scientists
Alliance for Bio-Integrity (www.bio-integrity.org), June 24, 1999
http://www.greens.org/s-r/21/21-11.html
o
http://online.sfsu.edu/~rone/GEessays/FDAdocuments.html
[10] Rough Cut Seeds of Suicide. India's desperate farmers, July 26, 2005
http://www.pbs.org/frontlineworld/rough/2005/07/seeds_of_suicid.html
[11] Commission to allow GMO contamination of all seeds, Brussels, 3 May 2004
http://www.saveourseeds.org/downloads/sos_pe_03_05_04_eng.pdf
[12] Transgenic DNA introgressed into traditional maize landraces in Oaxaca, Mexico.
Nature v.414, 541-543 29nov01 - David Quist & Ignacio H. Chapela
http://www.mindfully.org/GE/GE3/Chapela-Transgenic-Maize-Oaxaca-Nature29nov01.htm
[13] Este documento no está referenciado en el documental de marras. Sin embargo, recomendamos la lectura de
http://www.activistmagazine.com/images/stories/campaigns/GMO/paraguay_sojero_report.pdf
[14] “Seeding Values – Monsanto 2005 Pledge Report” (A focus on environmental, economic and societal impacts)
www.monsanto.com/pdf/pubs/2005/focus_impacts.pdf

domingo, 6 de abril de 2008

JORGE EDUARDO RULLI: “EL CONFLICTO AGRARIO ES COMO UNA MESA DE PÓKER DONDE TODOS JUEGAN CON LAS CARTAS MARCADAS”

Todos los domingos de 8 a 9 de la mañana en Radio Provincia AM1270 los colegas del Grupo de Reflexión Rural, con la dirección de Jorge Eduardo Rulli y la producción periodística de Bernardo Elffman ponían al aire “Voces de la tierra… en el Horizonte Sur”, un maravilloso programa que, como ellos mismos aseguraban, pretendía ser “una perspectiva de sostén y de esperanzas para las familias rurales subsistentes, así como para todos aquellos que retornaron a sus pueblos, y en especial para quienes en las periferias de las ciudades y en las zonas semirurales, preservan tenazmente la memoria de formas de autoconsumo y de producción ligadas a las prácticas agrarias tradicionales”. Evidentemente, para el poder político de la Provincia de Buenos Aires conceptos como “soberanía alimentaría” o “modelos sustentables” de “desarrollos locales” son peligrosas malas palabras, porque el programa fue levantado de la programación de dicha radio con la asunción del nuevo gobierno.

Pero el apriete fue mucho mas allá y viene del más alto nivel: todo hace pensar que también corre riesgo la continuidad del programa “Horizonte Sur” que el mismo equipo produce y emite por Radio Nacional desde hace tres años. Horizonte Sur ha sido “un altavoz para las víctimas de las catástrofes ambientales causadas por la expansión de los monocultivos y las nefastas consecuencias que estas prácticas traen aparejadas como intoxicación por fumigaciones, despoblamiento rural, deforestación masiva, inundaciones, perdida de calidad de suelos” pero además tienen su micrófono abierto para los afectados por la minería, las megarepresas, y la contaminación industrial.

La simultaneidad del agravamiento de la llamada “crisis agropecuaria” con estos reiterados actos de censura eran razones más que justificadas para charlar con Jorge Eduardo Rulli.

Prende la Luz: ¿La llamada “crisis agropecuaria” son los estertores de un sistema inviable?
Jorge Eduardo Rulli: De alguna manera sí. Es una crisis mal planteada: en estas manifestaciones encontradas, de oficialistas y sojeros, se va planteando una contradicción donde es muy difícil comprender lo que se está debatiendo. En nuestras conferencias le preguntamos a la gente ¿por qué se quejan los productores cuando las retenciones son un derecho a la exportación? Entonces los propios productores empiezan a contar que lo que pasa es que el Gobierno ha ido reconociendo a los exportadores como cobradores de un tributo que le descuentan al productor cuando le compran la soja, el maíz o el trigo, legitimando una situación muy grave.
Hay muchos elementos justos en los reclamos pero, por otra parte, existe una negativa a hablar de eso porque es más fácil embestir contra el Gobierno de la República que denunciar a Cargill o a Los Grobo. Uno también entiende, el productor se inhibe porque además hay un liderazgo histórico y, más allá de cómo termine la pelea, ellos tienen que seguir vendiéndole al cerealista. Los productores no se pueden pelear con el cerealista, es más fácil pelearse con Cristina. Desde el Gobierno esto habría que entenderlo también sobretodo cuando se ha avalado al cerealero para que le cobre el tributo al productor. Por otra parte, lo que muchos productores dicen es que no están en contra de las retenciones sino que quieren participar o ser informados de qué se hace con ellas y en eso algo de razón habría también. En la medida que el País pasa a ser cada vez más dependiente de los cultivos de soja es lógico que los sojeros quieran tener el poder político de saber qué está pasando. Esto también podría haber sido previsto por el Gobierno.

PLL: ¿De qué otras formas los exportadores se quedan con la “parte del león” de este negocio?
JER: Esto depende del precio internacional, entonces muchas veces el cerealero, o sea el exportador, hace reserva de una cantidad de grano que todavía no tiene, se anticipa y la Secretaría de Agricultura le permite exhibir una cantidad de grano que todavía no compró al precio de ese día. Después el grano aumenta, entonces los exportadores que tienen inscriptas cantidades considerables de grano, a por ejemplo 300 dólares, luego terminan colocándolo a 550 dólares la tonelada. Entonces acá también hay una complicidad del Estado que “hace la vista gorda” a esto.
Pero además, cuando el exportador le compra al productor, de esos 300 dólares, le descuenta el 40% y muchas veces el exportador ese grano no lo exporta sino que lo usa en otras cosas. Por ejemplo, si lo usa para hacer biodiesel paga mucho menos tributo, ahora pagaría el 25% cuando él le descontó el 40% al productor, entonces ahí hay otra tajada que se quedan las corporaciones. Porque un litro de aceite de soja casi da un litro de biodiesel pero la diferencia en tributo es muy grande y esa diferencia se la queda el exportador o semillero. En realidad le están pagando un “sobresueldo” al exportador lo cual representa una promoción desmesurada de los biocombustibles y además sobre las espaldas del productor. Y cuando uno ve que al lado de cada silo a lo largo del Paraná se está construyendo una planta de agrocombustibles y que están construyendo enormes “feedlots”, o sea corrales para engordar hacienda con los residuos industriales vegetales que produce la fabricación de biocombustibles, te das cuenta que el negocio de estas grandes corporaciones o de estos exportadores es muy grande. Y no sólo es muy grande sino que se están llevando una parte de lo que le sacan al productor. Cuando hablás con la gente, ellos lo tienen claro pero ellos no pueden denunciar al granario, al cerealista porque, como decía, después tienen que seguir la relación con él…

PLL: Enfrentar a esos grupos es la responsabilidad del gobierno central…
JER: De un gobierno central que debería ocuparse de transparentar estas relaciones, hacerlas públicas y sentar, en algún nivel de debate, a todos los miembros que participan de estas cadenas. Esto es bastante difícil de imaginar en un país donde el gabinete no se reúne, en un país normal el gobierno los sentaría en una mesa y los obligaría a debatir esto.

PLL: Es curioso que en ninguno de estos "encendidos" discursos de la Presidente se ha escuchado a ninguno de estos nombres que se quedan con la “parte del león” del negocio agropecuario y, curiosamente, tampoco en el discurso setentista de las fuerzas de choque que ha mandado el gobierno y que hablan de la “oligarquía” pero a ninguno se le escapa ni un Bunge ni un Cargill ni un Nidera…
JER: Uno tiene la culpa de ser un poco viejo y sobre todo tener memoria, porque, como he dicho hoy en Córdoba, me alegro que no tengamos Fuerzas Armadas porque estábamos en las puertas de otro 24 de marzo pero realizado como fruto de la estupidez y de la falta de políticas. Porque esto nosotros lo anunciamos, es una derrota que se construyó y a mi me da la impresión que este grupo setentista que nos gobierna es experto en construir este tipo de derrotas. Son como profecías autoanunciadas, porque acá peor o más torpe no se podría haber sido ya que los pequeños productores (si es que los hay) han quedado detrás del liderazgo de los grandes y, entonces, ahora los amigos del Gobierno, Gustavo Grobocopatel y el Senador Urquía, ponen distancia y dicen “lamentamos mucho esto y confiamos en que se convoque a un diálogo”. ¡Por supuesto!, donde ellos van a volver a llevarse “la parte del león”. Aparecen como los componedores cuando en realidad ellos son los líderes de esta propuesta. Siento que es como una mesa de póker donde todos actúan con cartas marcadas, todos se hacen los tontos y el Pueblo ha dejado de entender. Pero, es evidente que se juega mucha plata, se está jugando mucho dinero porque estábamos hablando antes de 6000 millones de dólares ¿cuánto puede ser eso ahora con los nuevos tributos?

PLL: …muchísimo dinero. Todas estas cuestiones eran muy claramente explicadas en una tribuna radial que ustedes disponían que era el programa “Horizonte Sur”, un hermoso programa en la mañana del domingo por AM1270 Radio Provincia pero que fue levantado. Quisiéramos saber porqué…
JER: Nosotros hemos tratado de ser respetuosos con las autoridades y muy concientes de que estábamos en un espacio del estado nacional pero tenemos derecho a disentir y a expresar y fundamentar por qué disiento. Por ejemplo, en este debate, ni ahora no ni antes, estuvo la parte ecológica. Acá hay una discusión entre gente que pelea por dinero y la verdad es que cada exportación de soja se está llevando el 20% del suelo argentino. La crisis del fósforo del suelo argentino es catastrófica, me refiero a la forma en la que está desapareciendo el fósforo, eso es muy difícil de reemplazar. La materia orgánica del suelo está desapareciendo de una manera galopante, la vida biológica del suelo a entrado en crisis y por eso los días que llueve no hay olor a “tierra mojada”. Ya en el campo no hay olor a tierra mojada y eso es porque no hay vida bacteriana y eso significa que no hay colonias de bacterias que humifiquen los restos sean vegetales o animales. Me refiero a que, por ejemplo, si muere un bicho en un suelo rico rápidamente desaparece porque las bacterias, los microbios y los insectos se lo comen y lo incorporan al suelo, lo mismo con cualquier desecho vegetal; hay suelos argentinos que ya no pueden humificar los restos sino que los momifican o sea que uno ve como la planta se va desecando y parece una momia, simplemente se va deshidratando por el sol pero no hay vida microbiana que se la coma. A mi me parece que esto es muy grave porque acá nadie dice que estamos perdiendo el suelo y que el es el patrimonio de los argentinos aún no nacidos y se decide por ellos. Y me parece que la presidenta no tiene la menor idea ni autoridad para decidir por los que no nacieron. Es un tema para debatir y habría que recordarle a los bandos en pugna que La Argentina no es solamente de ellos, que compraron una chacra o una estancia sino que es de todos.

PLL: ¿Qué otras cuestiones de las que se debatían en “Horizonte Sur” pudieron molestar al poder político?
JER: Lo otro que me parece que en el programa ha molestado es mi obsesión de vincular los años ’70 con los nuevos desafíos porque para ellos la historia comienza en 1976. A mi me parece, y hoy la gente me lo decía, porque ya todo el mundo se empieza a dar cuenta que acá arrastramos una herida que es anterior al 24 de marzo, el Pueblo argentino llega al 24 de marzo con una herida generacional, de una generación enfrentada a otra, de un quiebre interno de la vida política argentina que, además, es un tema que supera al peronismo porque las juventudes políticas englobaban a todos los partidos y todas enfrentaban a sus líderes, acá hubo “una cosa interna” que no resolvimos y esa herida, en la medida en que no se cicatriza, se reproduce en las nuevas generaciones con nuestros propios hijos y eso hace que no tengamos historia que cada generación no sepa capitalizar el esfuerzo de la anterior en una misma línea, no tenemos proyecto nacional, no tenemos un Estado que regule y lo que tenemos son ahora una persona entre caprichosa y autoritaria que será muy inteligente pero que no puede abarcar sola todo un contexto tan complejo como lo que se ha desatado. De hecho nosotros anunciamos la “republiqueta sojera” y esa republiqueta ahora quiere asumirse políticamente, quiere participar y saber dónde va el dinero que produce. Si aceptamos la “republiqueta sojera” hay que aceptar las reglas del juego, pero por este camino, si seguimos cometiendo errores como los que se cometieron estos días, con inmadurez, con miradas excluyentes y pensando que con el “barbudo” del Movimiento Evita y con D’Elía se puede solucionar este problema, el próximo presidente de la Argentina es Gustavo Grobocopatel…

Programa del 27 de marzo de 2008.

N.d.E.: Mientras desgrabábamos esta entrevista ocurrió lo que más temíamos. El lunes 3 de marzo Rulli fue convocado por el Gerente de Artística de Radio Nacional, Alejandro Piccinini, quien le comunicó que debido a que el nuevo Director de la Radio, García Cafi, había decidido incorporar a una serie de periodistas (Maria Seoane, Eduardo Anguita, Mario Wainfeld, Jorge Halperin y Carlos Ulanovsky entre otros) el programa Horizonte Sur sería levantado. La reacción de oyentes y colegas comprometidos fue masiva e inmediata. Desde “Prende la Luz” nos solidarizamos con los colegas de “Horizonte Sur” e instamos a nuestros propios oyentes a levantar la voz y hacer lo que esté a su alcance para evitar este injustificable atropello contra uno de los pocos programas que dedica sus esfuerzos al tema de la ecología y de las luchas antiglobales. [1]

[1] Recomendamos la lectura de los editoriales de “Horizonte Sur” en
http://www.grr.org.ar/horizontesur/index.php?verpagina=editoriales.php&titulo=Editoriales