Por supuesto, “Prendé la Luz” marchó junto a la Unión de Asambleas Ciudadanas en la que fue la Primera Movilización y Concentración Nacional Ambiental “No Al Saqueo, No A La Contaminación”. Bajo la consigna “No” a la minera contaminante a cielo abierto, no a las papeleras en la cuenca del Río Uruguay; no a los emprendimientos que, no solo contaminan nuestro ambiente y agreden nuestra salud, sino que pretenden modificar nuestro estilo de vida, nuestra cultura y nuestros emprendimientos productivos regionales sin que ninguna de las comunidades les haya otorgado una licencia social previa para ello. Y por el “Si” a la puesta en marcha de políticas publicas nacionales y regionales genuinamente participativas. En definitiva, la única consigna es la defensa de los derechos ciudadanos y del esencial derecho a la vida y el pleno ejercicio del derecho de peticionar a las autoridades. Hoy tenemos una buena noticia…
El convenio con Australia abrió una puerta de especializar al país en recibir y tratar residuos radiactivos provenientes de todo el mundo. Es decir, ya no sólo la de recibir los residuos que vendrán de Australia sino las toneladas que llegarán después asumiendo los riesgos que otros países no quieren correr en sus respectivos territorios.
El director de cine, Juan Schroder, presentó un amparo destacando la inconstitucionalidad de ese contrato. El Juez de primera instancia lo rechazo, pero la Cámara Federal de Apelaciones de Bahía Blanca le dio la razón y ordeno quitar del contrato la cláusula que permite el ingreso de basura radiactiva al país. Con lo cual, el tema pasa ahora a la Corte Suprema de Justicia para una resolución definitiva. Veremos cuán independiente resulta la nueva Corte…
Del fallo he extractado algunos párrafos significativos...
La causa se titula: AMPARO. INGRESO AL PAIS DE RESIDUOS RADIACTIVOS. Reactor nuclear a instalarse en Australia. Nulidad de la cláusula contractual. Industria del tratamiento de residuos radiactivos. Principio precautorio. "SCHRODER, Juan c/ INVAP S.E. y E.N. s/ Amparo" - CAMARA FEDERAL DE APELACIONES DE BAHIA BLANCA - 19/10/2006.
"Es inconstitucional (art. 41, cuarto párrafo. Constitución Nacional) la intención de la accionada, de ingresar al territorio del país combustible quemado, de un reactor nuclear vendido a Australia, residuos y desechos radiactivos."
"Considerar que ello no violenta el art. 41 de la Carta Magna (que prohíbe llanamente el ingreso de residuos radiactivos) o que no resulta contrario a su espíritu, importaría una interpretación irrazonable del texto constitucional prohibida, a su vez, por el art. 28 C.N. pues habilitaría la estancia permanente en el país de residuos radiactivos de origen extranjero. No puede llegarse a otra conclusión, pues se impone respetar el deseo de los constituyentes, plasmado en la finalidad última del artículo 41, que como ya mencionara con apoyo en calificada doctrina, no es otra que la preservación del medio ambiente. Ello surge prístinamente del debate desarrollado en el seno de la Convención Nacional Constituyente.”
"Por todo ello, considero que la cláusula contractual por la cual se obliga la demandada a aceptar el retorno al país del combustible gastado en el reactor nuclear australiano infringe la prohibición establecida en el art. 41 de la Constitución Nacional. En consecuencia y teniendo en cuenta que tal obligación se presenta como alternativa de otras que no se oponen a nuestra Ley Fundamental, concluyo que debe hacerse lugar al amparo y declarar la nulidad de la cláusula 3.2.3.2.2 del contrato celebrado entre INVAP S.E. y ANSTO”.
Hace algunos años, el gobierno australiano planeó construir un repositorio de desechos radioactivos en Australia Meridional. Para ello había elegido la zona de Woomera donde habitan los pueblos aborígenes Kungka Tjuta que, por supuesto, organizaron una gran campaña de resistencia a la que bautizaron Irati Wanti ("veneno, ¡abandónalo!"). En diciembre de 2004 la Cámara de Diputados de la Nación aprobó el Acuerdo entre la República Argentina y Australia sobre Cooperación Nuclear. En agosto de 2004, el gobierno australiano desechó sus planes de instalación del vertedero nuclear de Woomera ¿casualidad? Habrá que estar muy, pero muy atentos…
M.S.
El convenio con Australia abrió una puerta de especializar al país en recibir y tratar residuos radiactivos provenientes de todo el mundo. Es decir, ya no sólo la de recibir los residuos que vendrán de Australia sino las toneladas que llegarán después asumiendo los riesgos que otros países no quieren correr en sus respectivos territorios.
El director de cine, Juan Schroder, presentó un amparo destacando la inconstitucionalidad de ese contrato. El Juez de primera instancia lo rechazo, pero la Cámara Federal de Apelaciones de Bahía Blanca le dio la razón y ordeno quitar del contrato la cláusula que permite el ingreso de basura radiactiva al país. Con lo cual, el tema pasa ahora a la Corte Suprema de Justicia para una resolución definitiva. Veremos cuán independiente resulta la nueva Corte…
Del fallo he extractado algunos párrafos significativos...
La causa se titula: AMPARO. INGRESO AL PAIS DE RESIDUOS RADIACTIVOS. Reactor nuclear a instalarse en Australia. Nulidad de la cláusula contractual. Industria del tratamiento de residuos radiactivos. Principio precautorio. "SCHRODER, Juan c/ INVAP S.E. y E.N. s/ Amparo" - CAMARA FEDERAL DE APELACIONES DE BAHIA BLANCA - 19/10/2006.
"Es inconstitucional (art. 41, cuarto párrafo. Constitución Nacional) la intención de la accionada, de ingresar al territorio del país combustible quemado, de un reactor nuclear vendido a Australia, residuos y desechos radiactivos."
"Considerar que ello no violenta el art. 41 de la Carta Magna (que prohíbe llanamente el ingreso de residuos radiactivos) o que no resulta contrario a su espíritu, importaría una interpretación irrazonable del texto constitucional prohibida, a su vez, por el art. 28 C.N. pues habilitaría la estancia permanente en el país de residuos radiactivos de origen extranjero. No puede llegarse a otra conclusión, pues se impone respetar el deseo de los constituyentes, plasmado en la finalidad última del artículo 41, que como ya mencionara con apoyo en calificada doctrina, no es otra que la preservación del medio ambiente. Ello surge prístinamente del debate desarrollado en el seno de la Convención Nacional Constituyente.”
"Por todo ello, considero que la cláusula contractual por la cual se obliga la demandada a aceptar el retorno al país del combustible gastado en el reactor nuclear australiano infringe la prohibición establecida en el art. 41 de la Constitución Nacional. En consecuencia y teniendo en cuenta que tal obligación se presenta como alternativa de otras que no se oponen a nuestra Ley Fundamental, concluyo que debe hacerse lugar al amparo y declarar la nulidad de la cláusula 3.2.3.2.2 del contrato celebrado entre INVAP S.E. y ANSTO”.
Hace algunos años, el gobierno australiano planeó construir un repositorio de desechos radioactivos en Australia Meridional. Para ello había elegido la zona de Woomera donde habitan los pueblos aborígenes Kungka Tjuta que, por supuesto, organizaron una gran campaña de resistencia a la que bautizaron Irati Wanti ("veneno, ¡abandónalo!"). En diciembre de 2004 la Cámara de Diputados de la Nación aprobó el Acuerdo entre la República Argentina y Australia sobre Cooperación Nuclear. En agosto de 2004, el gobierno australiano desechó sus planes de instalación del vertedero nuclear de Woomera ¿casualidad? Habrá que estar muy, pero muy atentos…
M.S.
Programa del 14 de diciembre de 2006
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